lunes, octubre 16, 2006

Tres versos de Virgilio

Platico en el messenger con Mazurka, y le transcribo tres versos de la que es, quizá, la más hermosa traducción de las Geórgicas a nuestro idioma:

Mira también en la floresta opaca
Cuando vestido en flores, opulento
Dobla el almendro los fragantes ramos
(VIRG., Georg. I, vv. 307-309 de la traducción de M. A. Caro).

Nos quedamos en silencio (virtual), y decimos que es hermoso. Hablamos de la sencilla majestuosidad de Virgilio. Pienso en Agustín y el "sublime humilde" del que habla Erich Auerbach: el cristianismo rompió con la división entre estilos al mostrar, con los Evangelios, que lo más grande podía ser dicho con las palabras más sencillas. Esa ruptura la sitúa Auerbach en los sermones y comentarios de Agustín, y --en toda su plenitud-- en la Comedia de Dante Aligheri. Y ambos tomarán como modelo para ese sublime humilde a Virgilio, "el más cristiano de los escritores paganos", como dirán una y otra vez biógrafos y comentaristas, de Juan Luis Vives a Jules Michelet...


Mazurka dice también que, en su tono, Virgilio se parece mucho a Góngora. Luego se ríe, y dice que más bien deberíamos decir que Góngora se parece a Virgilio (pero no es cierto, respondo yo adentro mío, y pienso en Eliot, en Bajtín y en Tomás de Aquino: pues la tradición nos sólo se construye de atrás para adelante, sino también de adelante para atrás). Ambos decimos "sí", y nos quedamos en silencio (virtual). Entonces Mazurka dice que en lo único en que no se parecen Góngora y Virgilio es que Góngora habla idioma Yoda:

"Sin duda, maravillosa la mente de un niño es" (Yoda, en Episodio II) (qué mala película pero qué bonito es Yoda).


Son el tipo de bromas por las que luego mi novia se desespera...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Es impresionante la belleza de los versos de Virgilio. Sin duda, también lo son los versos inconmensurables del Polifemo que camina por la cueva, buscando la luz del día. Deberías decirle a Mazurka que sea mucho más respetuosa!

Rafael Mondragón dijo...

Pero si eso es justo lo que me encanta de Mazurka... Su sinceridad, que siempre va unidad a sus sensibilidad :)