lunes, noviembre 17, 2008

Guitarra barroca y son jarocho

Chagall, Le paysage bleu.
Estas semanas he estado escuchando, y re-escuchando, un hermoso disco de Eloy Cruz y Enrique Barona (con "B"). El disco se llama Laberinto en la guitarra. El espíritu barroco del son jarocho. Los invito a oír lo que sigue: primero se interpreta Los Ympossibles, pieza de Santiago de Murcia (1862-1732); inmediatamente, La lloroncita:




Las décimas recitadas en el video son las siguientes:
¿Quién te quiere, quién te llama?
por tu bien o por tu mal;
¿quién te cortó de la rama
que no estás en mi rosal?

¡Ay, llorar, Llorona,
pero qué infelicidad!
ya me llevan, ya me traen
preso para la ciudad,
con grillos y con cadenas,
cautivo y sin libertad.

Para qué quiero yo cama,
cortinas y pabellones
si no me dejan dormir
muchas imaginaciones,
para qué quiero yo cama,
cortinas y pabellones.

¡Ay de mí, Llorona!,
mi alma, déjame llorar.
¡Ay, llorar, Llorona!,
mi alma, déjame llorar.
que la causa de mi llanto
es que nunca supe amar,
y por eso lloro y canto.

Al final, los músicos rematan con un estribillo que proviene de la obra poética amorosa de fray Joseph Ignacio Troncoso (1795):
No lloren, ojos hermosos,
no lloren que se hacen mal,
y es lástima que dos soles
queden turbios por llorar.
No lloren, ojos hermosos,
no lloren que se hacen mal.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Gracias por texto hermoso de Murcia.
Asbel Paris

Rafael Mondragón dijo...

Hola, Asbel. La música es de Murcia; el texto es una composición popular. Te mando un saludo, aquí nos estamos leyendo.

Anónimo dijo...

Excelente.
Muchas gracias.
Las décimas son hermosas y el cante llega a helar la sangre.
Al respecto sólo puedo agregar que también los versos son de "doña Rosita la soltera o el lenguaje de la Flores" de el gran García Lorca.
Gracias nuevamente por haber incluido la letra de tan bella canción.
Desde Chile.
RA

Anónimo dijo...

Rafael,
Gracias por haber publicado tan bella canción, con un cate y una letra que hiela la sangre.
Una corrección, las décimas no corresponden a García Lorca sino al poema "la rosa del jardinero" de Serafin Alvarez Quintero.
Ha sido una confusión.
Saludos
RA

Rafael Mondragón dijo...

Gracias por el dato, RA. Habría que ver si Álvarez Quintero las tomó de la tradición oral o si, por el contrario, las décimas se oralizaron y popularizaron a partir de las de éste... Te mando un saludo.